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Las 5 razones por las que el aceite de oliva le va bien a nuestra salud digestiva

Las 5 razones por las que el aceite de oliva le va bien a nuestra salud digestiva

Como hoy, 29 de mayo, es el Día Mundial de la Salud Digestiva, nos parece interesante recordar las 5 razones por las que el aceite de oliva virgen extra le va bien a tu salud digestiva

Con esta jornada, promovida por la Organización Mundial de Gastroenterología (WGO) en 2005, se quiere concienciar a la sociedad sobre la importancia de prevenir y tratar las enfermedades digestivas. ¿Sabéis que en el aparato digestivo, y específicamente en el intestino, se concentra aproximadamente el 70% de nuestras defensas? Hay en él más de 1.000 especies de bacterias digestivas, en su mayoría beneficiosas para nuestra salud digestiva.

Y, como sabemos que el consumo regular y moderado de aove, es estupendo para la salud digestiva, no está de más destacar por qué ello es así.

El aceite de oliva favorece al tracto digestivo

¿Por qué? Porque fomenta la producción de los péptidos (las moléculas que participan en el proceso digestivo), previene la acidez y reduce el reflujo gastroesofágico. La recomendación de los expertos médicos de consumir la dosis diaria recomendada (3 o 4 cucharadas) y, como no, tomar una de ellas en ayunas, no es baladí. Diversos estudios apuntan a que el aceite de oliva disminuye la acidez gástrica al formar una película protectora en el estómago. Reduce así el pH ácido y favorece el bienestar digestivo.

2 Contribuye a evitar que comamos más de la cuenta

Lo hace porque ayuda a que el contenido del estómago se libere lenta y gradualmente al intestino, lo que incrementa la sensación de saciedad. Y, por tanto, hace que no comamos más cantidad de la que realmente le viene bien a nuestro organismo. Todo ello es gracias a una sustancia denominada oleiletanolamida, sintetizada en el intestino a partir del ácido oleico y que tiene un efecto saciante.

Todos sabemos que muchos de los problemas digestivos más cotidianos están relacionados con que ‘sobrecargamos’ nuestro sistema digestivo con comidas muy pesadas y copiosas. Y el aceite de oliva hace que no nos pasemos de la raya 😉.

3 El aceite de oliva virgen extra previene los procesos intestinales inflamatorios

Es uno de los alimentos más ricos en polifenoles, lo que contribuye a evitar la oxidación celular y potenciar  procesos intestinales antinflamatorios. ¿Y en qué se traduce eso? En que ayuda a reducir la inflamación y los niveles de colesterol, lo que lo convierte en un alimento fundamental para personas que problemas digestivos crónicos.

4 El AOVE promueve una buena absorción de los nutrientes

Además al tener mucho omega 3 y omega 9  protege la salud intestinal y puede ayudar a prevenir patologías como el cáncer de colon. Además, es rico en ácidos grasos esenciales, como el ácido oleico, que promueve una absorción saludable de los nutrientes y ayuda a prevenir malestares estomacales. También ejerce un efecto calmante sobre el estómago, favoreciendo la digestión y el tránsito intestinal de una manera adecuada y ayudando incluso a evitar el estreñimiento.

5 Tiene valiosas propiedades antibacterianas 

El aceite de oliva virgen extra también actuar en la prevención del desarrollo de muchas enfermedades. Sus propiedades antibacterianas, por ejemplo, han demostrado ser eficaces contra ocho cepas de la bacteria Helicobacter pylori, que puede causar úlceras y que se encuentra en el sistema digestivo de la mitad de la población. Un estudio del CSIC (Consejo Superior de Investigaciones Científicas) indica de hecho que el aceite de oliva es recomendable para luchar contra ella.