Hablamos hoy de tostas, de tostadas con un toque de aceite de oliva. Hablamos de pan con un punto crujiente y aderezado por un sinfín de ingredientes que convierten el alimento básico en un manjar más delicioso aún.
¿Y por qué hablamos de tostas con AOVE? Porque son aperitivos no muy complicados de elaborar, están buenísimos y sacian hasta el punto de que quizá te sirvan de desayuno, merienda o cena sin pestañear.
Empezamos…
Tostas de pipirrana con aceite de oliva
¿Quién no conoce la pipirrana? Es una de las ensaladas más conocidas y comunes en verano y [no sabemos a vosotros pero] nos encanta. Para hacer la tosta de pipirrana necesitamos: 6 tomates bien maduros, una cebolla, un huevo, ajo, sal, aceite de oliva virgen extra y vinagre. Y, por supuesto, las rebanadas del tipo de pan que más nos guste. Podéis ver la forma de elaboración en este enlace de 65ymas.
Tostas de sardinas
Otro alimento veraniego, saludable, nutritivo y económico… Las sardinas. Si te gusta este jugoso pescado tan propio de estas fechas, las tostas de sardinas con AOVE te encantarán. Las combinaciones son muchísimas, pero a nosotros nos ha convencido una receta con tomate y cebolla crujiente, que va de lujo con pan rústico y un chorreoncito de aceite de oliva virgen extra. Necesitamos: sardinas, dos tomates, cebolla, orégano, rebanadas de pan rústico, una cucharada de pan rallado, sal, pimienta, aceite de oliva virgen extra [y guindilla si te gusta el picante]. La receta la hemos visto estos días en Hola.
Tosta de aguacate y salmón
Sabemos que ya es bastante conocida, pero es de nuestras preferidas. Combinar tres súper alimentos -como el aguacate, el salmón y el AOVE- resulta, además de delicioso, la mar de saludable y nutritivo. Puedes utilizar pan de hogaza y tostarlo o comprar tostas preparadas (aunque, como sabéis, mejor evitar alimentos procesados). Utiliza como base el salmón ahumado y, a continuación, marina un poco el aguacate con aceite de oliva virgen extra, pimienta negra y un poquito de lima. A partir de ahí puedes añadir todo lo que te parezca conveniente y te guste. Hablamos de huevo duro, cebollino picado, alcaparras, trocitos de anchoa, crema de queso… En fin, el gusto es nuestro.